(Por Jesús Castro Herrera) – No suelo escribir mucho en redes sociales, de hecho prácticamente no las miro y cuando lo hago, me limito a ver y dar algún like suelto y poco más. A veces veo fotos de compañeros de servicio, que solo dan los buenos días o buenas noches… y son en demasiadas ocasiones acribillados por mil historias.
Que si no es legal hacerse fotos, que si van equipados para ir Afganistán, que si van maquillad@s, que los tatuajes y mil excusas para degradar, insultar y/o humillar.
Obviamente cada uno dice lo que quiere, ya sabéis, LIBERTAD de expresión, faltaría más. Pero la LIBERTAD es una carretera de un solo sentido, cada cual tiene la suya, hasta el momento que pidas la de los demás, y eso es justamente lo que hacéis, quien lo haga, al criticar al compañero.
Las empresas se relamen cuando ven que estamos enfrentados, lo fomentan hasta el punto de inventar un nombre para que no sintamos que pertenecemos a un grupo, nos llaman «COINCIDENTES LABORALES«.
Hemos dejado que las empresas marquen nuestro día a día, mientras los sindicatos por acción o dejación han permitido que ocurra. Y el sector de la seguridad privada está infravalorado y nuestro trabajo es absolutamente precario, con convenios de risa, mal pagados, desprotegidos física y jurídicamente.
Seguid así, coincidentes laborales, preocuparos de la vida de las demás, por las fotos que cuelgan. No miréis vuestras nóminas, ni el convenio, ni la ley de seguridad privada.
Mientras, las empresas y los clientes se DESCOJONAN DE NOSOTROS.
Y ahora, criticad, criticad, que es lo que os mola.
Totalmente de acuerdo, ese discurso lo llevo aquí en Algeciras,Cádiz, el miedo es que las demás provincias, comunidades, sean justamente como hablamos.Si habláramos todos el mismo idioma ,otros gallos cantarían.