(Por SoySeguridadPrivada) – El Judo Verbal, también conocido como autodefensa verbal, es una técnica de manejo de conflictos que utiliza palabras en lugar de la fuerza física para prevenir, reducir o finalizar una situación potencialmente violenta. Se enfoca en mantener la seguridad mental y emocional a través del uso de la postura, el lenguaje corporal, el tono de voz y la elección adecuada de palabras. Esta técnica se basa en principios de artes marciales como el judo y el aikido, donde la clave es redirigir la energía del oponente para evitar la confrontación física.
Aplicación en la Seguridad Privada
Para los Vigilantes de Seguridad, el Judo Verbal es una herramienta invaluable en situaciones de conflicto. Permite manejar situaciones tensas de manera no violenta, lo cual es crucial para mantener la calma y la seguridad en entornos diversos. Los vigilantes pueden emplear esta técnica para desescalar conflictos, negociar con personas alteradas y resolver disputas de manera pacífica.
Modos y Técnicas del Judo Verbal
El Judo Verbal se articula en cinco pasos fundamentales:
- Escuchar: Practicar la escucha activa, donde se presta total atención al interlocutor sin interrupciones, permitiendo que se desahogue completamente.
- Empatizar: Mostrar empatía, entendiendo y reconociendo los sentimientos del otro, lo cual ayuda a generar un ambiente de confianza.
- Preguntar: Hacer preguntas para aclarar dudas y asegurar que se comprende completamente el problema. Esto ayuda a desenterrar cualquier conflicto subyacente.
- Parafrasear: Repetir lo que ha dicho el interlocutor con nuestras propias palabras para confirmar la comprensión y mostrar que se está prestando atención.
- Resumir y Proponer: Resumir lo discutido y proponer soluciones claras y concisas, asegurando que ambas partes estén de acuerdo en los próximos pasos a seguir.
Beneficios del Judo Verbal
El uso del Judo Verbal en seguridad privada ofrece múltiples beneficios, como la reducción de la violencia física, la mejora de la relación con el público y el incremento de la seguridad emocional tanto del vigilante como de las personas involucradas. Además, fomenta un ambiente de respeto y colaboración, lo que puede ser fundamental en situaciones de alta tensión.
Capacitación y Entrenamiento
Los Vigilantes de Seguridad deben recibir una formación específica en Judo Verbal para dominar estas técnicas. La capacitación incluye prácticas de simulación de conflictos, análisis de casos reales y ejercicios de comunicación efectiva. Esto garantiza que los vigilantes estén preparados para aplicar estas técnicas de manera eficiente en su trabajo diario.
Casos de Éxito
Existen numerosos casos de éxito donde el uso del Judo Verbal ha sido decisivo para resolver conflictos sin recurrir a la violencia. Por ejemplo, en situaciones de confrontación en eventos públicos, vigilantes capacitados en Judo Verbal han logrado calmar a individuos alterados mediante la comunicación efectiva, evitando así situaciones potencialmente peligrosas.
El Judo Verbal es una técnica esencial en la Seguridad Privada, proporcionando a los vigilantes herramientas efectivas para manejar conflictos de manera pacífica y profesional, mejorando la seguridad y la confianza en sus capacidades.
Claaaro, en el polígono a las 3:20h de la mañana nos vamos a poner a hacer judo verbal con los 4 encapuchados el compañero y yo, o en el metro con esos amables jovenlandeses que se saltan el torno y siempre van acompañado del progre justiciero del móvil, o en línea de cajas con la rumana que se ha guardado una cuña de queso en cada sobaco y una botella de whisky en la entrepierna y se vale del alboroto para que no la registre… ya. El carácter de autoridad no; una ley de verdad no, mejor desescalar… Qué luego viene el de la toga y los deja salir a las 2 horas, y reza porque no se ofenda y te quiera denunciar. Al lumbreras del judo verbal lo ponía yo a trabajar de vigilante, a ver qué judo utiliza en alguna de esas. Si la seguridad depende de la tibieza y el progresismo, vamos haviados. Despidámonos de la autoridad y el orden, adoptemos mejor la anarquía …ya puestos. Vaya tela