(Por SoySeguridadPrivada) – Todos, absolutamente todos los que han sido, son y serán compañer@s de esta profesión saben perfectamente de lo que hablo… No en vano es, con diferencia, el tipo de servicio más extendido en el sector de la Seguridad Privada: EL AGENTE SOLITARIO.
Ya seas Vigilante de Seguridad, Escolta o Guarda Rural, sabes que en la mayoría de ocasiones vas a estar SOLO (casi siempre DESARMADO) y con escasas posibilidades de salir airoso ante cualquier amenaza o riesgo que se cierna sobre tu objeto de protección. Es lo que hay.
En un mundo donde lo que prima es la facturación de la empresa, el ahorro del cliente, y las “espaldas cubiertas” de aseguradoras y Administraciones Públicas, el AGENTE DE SEGURIDAD PRIVADA es solo una moneda de cambio. Un peón que nada tiene que hacer en una partida en la que por desgracia hay muchos jugadores ganando, y SIEMPRE un mismo perdedor.
El agente que actúa solo es un «blanco fácil» para burlas, insultos, amenazas o agresiones. Porque está SOLO(A) y quien está en frente lo sabe. Y eso unido a la falta de respeto y valores generalizada en nuestra sociedad, es un caldo de cultivo peligroso. Cada día algún compañero es insultado, agredido, amenazado, etc. Pero esto NO parece importar a ningún estamento oficial, colectivo ciudadano, ONG, partido político, patronal o agrupación sindical…
Y mientras el DINERO siga siendo MÁS VALIOSO que la DIGNIDAD, la SEGURIDAD, la SALUD, e incluso LA VIDA de quienes nos dedicamos a esto, las cosas por desgracia SEGURÁN SIENDO ASÍ. Y si a esto le sumamos la apatía, la desunión, los intereses particulares, el miedo, y las “barrigas agradecidas” que intoxican al sector, la solución se antoja complicada…
Por mucho que lo intento, no logro hacer acopio de cosas positivas de trabajar en solitario cuando bajo tu responsabilidad recae nada menos que la de «ejercer la vigilancia y PROTECCIÓN de BIENES Y PERSONAS(…)” con todo lo que ello conlleva. Y, sin embargo, la balanza se desnivela exponencialmente cuando enumero las desventajas de prestar servicio en solitario.
Aún así, ya sea en un centro comercial, una fábrica alejada, una finca perdida, un polígono oscuro, un acompañamiento a un empresario o político amenazado, etc… sin medios ni recursos adecuados, sin el apoyo inmediato de ningún compañer@, sin casi nunca testigos, el AGENTE DE SEGURIDAD PRIVADA ejercerá su trabajo poniendo toda su PROFESIONALIDAD y CAPACITACIÓN para cumplir con su OBLIGACIÓN.
Porque, por muy “privados” que puedan ser los intereses protegidos, nuestra función como COLABORADORES, AUXILIARES Y COMPLEMENTARIOS de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad, ayudando al mantenimiento de la SEGURIDAD CIUDADANA (así como la SEGURIDAD que imprime nuestra presencia hacia las personas a las que protegemos cada día) nos hace valedores de un ORGULLO mayor que el de cualquier mención, medalla o plus económico: EL DE SER ÚTILES A LA SOCIEDAD Y CONTRIBUIR A GARANTIZAR LA SEGURIDAD DE TOD@S.
(Autor desconocido)