(Por SoySeguridadPrivada) – Los Vigilantes de Seguridad adscritos al servicio del CETI de Melilla avisan de la difícil situación que se está pasando en el centro con inmigrantes en su mayoría de origen tunecino, situación agravada por el confinamiento y por la cuarentena obligatoria provocada por la alerta sanitaria, que termina originando insultos a los trabajadores, incumplimientos de las normas y peleas entre los internos.
Según la noticia publicada en el periódico Melilla Hoy, los tunecinos son conscientes de la situación y la aprovechan las normas del centro en su beneficio, apartándose del comportamiento del resto de internos que sí que están concienciados en la lucha contra el Covid19.
Los insultos y vejaciones hacia los vigilantes son constantes, ya que, a pesar de que los tunecinos conocen las normas del centro son sorprendidos de manera habitual fumando porros, cocinando en el interior de las carpas, creando molestias al resto de los residentes, saltándose las colas y exigiendo la apertura del comedor cuando este ya esta cerrado.
Son 10 vigilantes para 1600 internos, y avisan de que la situación se esta caldeando cada día mas.